Seguro que muchos de vosotros tenéis retenido en vuestra memoria algún viaje con la familia cuando erais pequeños. Porque viajar a todos nos marca, pero especialmente a los niños que, por muy pequeños que sean, a medida que se vayan haciendo mayores esos recuerdos irán aflorando y recordarán cómo fueron aquellos primeros viajes en familia.
Sabemos que a muchos os asaltan las dudas a la hora de viajar con los más pequeños de la casa porque algunos de los viajes son largos y con vuelos intercontinentales. Y quién no recuerda esos eternos viajes por carretera cuando éramos niños y ninguno quedamos traumatizados ?. Hoy en día las cosas han cambiado y para ellos un vuelo de 10 horas con todas las comodidades no les pasa absolutamente nada.
Si , todo y así, seguís sin estar convencidos os damos unos cuantos motivos para que os decidáis a viajar con ellos.
Estrechar lazos familiares
Nuestro día a día no nos permite pasar muchas horas en familia así que un viaje todos juntos es una gran oportunidad para pasar el máximo de tiempo con ellos.
Hacedlo antes de que crezcan
No esperéis a que los niños sean mayores para viajar juntos porque cuando crecen a veces ya no quieren viajar con nosotros. Empezando desde pequeños podéis crear un hábito que perdure en el tiempo y que a medida que vayan creciendo sigan deseando ese viaje con la familia como una tradición.
Despertar la curiosidad
Viajar significa conocer otras formas de vida que les chocaran en un primer momento. Seguro que se preguntarán por qué pero a medida que vayan encontrando las respuestas a esos por qué encontrarán la normalización de las diferentes formas de organización que vayan descubriendo.
Conocer otras culturas
Viajar les permitirá conocer otras culturas y que les permitirá ser más tolerantes a medida que vayan creciendo.
La gastronomía
Conocer otros países les permitirá conocer una cocina totalmente distinta a la que están acostumbrados. Quizás al principio les cueste un poco habituarse pero si les ayudamos seguro que prueban cosas nuevas y ampliaran sus gustos culinarios.
Viajar es una escuela
Viajar no deja de ser una escuela pero en movimiento donde pueden aprender de geografía, historia, arte, flora y fauna y encima sobre el terreno. Y si queremos rizar el rizo matemáticas porque cada país tiene su moneda y se puede practicar calculando los cambios e incluso las equivalencias de precios.
Aprender idiomas
Dicen que los niños tienen más facilidad para aprender idiomas nuevos así que dejemos que en los viajes aprendan nuevas palabras y porqué no, ponerlas en práctica: os sorprenderán.
Respeto por la naturaleza
Sabemos que para eso no hace falta irse de viaje para que lo aprendan pero si es seguro que viajando les dará la oportunidad de ver animales en libertad que les dejarán sin habla. Una gran oportunidad para enseñarles lo importante que es cuidar del medio ambiente y el respeto por los seres vivos.
Volver a sorprenderse
Los niños tienen una gran facilidad por sorprenderse por cualquier cosa, por sencilla que sea y eso nos dará la oportunidad para que nosotros también nos volvamos a sorprender y disfrutar de las pequeñas cosas, esas que muchos ya habíamos olvidado que existían.
Con ellos llega la calma
Ellos llevan un ritmo mucho más tranquilo la cual cosa nos permite disfrutar más de cada uno de los lugares a los que vamos y visitamos.
La vuelta a casa
Para nosotros la vuelta a casa significa volver a nuestra rutina habitual y por consiguiente tener el síndrome post vacacional. Para ellos, es como volver de una aventura que contarán a sus amigos. Hacer el álbum de fotos juntos puede hacer alargar un poquito más ese viaje.
Enhorabuena por el artículo, a ver si poco a poco se van normalizando los viaje sen familia. Un saludo.