Corea del Sur vs Japón. Identidad cultural propia, tradición y modernidad.
La principal diferencia entre Japón y Corea del Sur en lo que se refiere a la comida, es el diferente uso de las especias. Mientras la comida coreana usa muchas especias, la comida japonesa mantiene sus preparaciones más naturales con solo un mínimo de sabores agregados. En la cocina coreana se encuentran especialmente platos calientes y especiados.
El pescado y el marisco forman parte de la dieta tradicional japonesa. El sushi y el sashimi, son identitarios de la región. Por otro lado, los coreanos son grandes consumidores de arroz, vegetales y carne acompañando estos con una gran variedad de guarniciones, entre ellas el Kimchi.
La religión predominante en Japón es el sintoísmo que convive con el budismo y el cristianismo a pesar de que una importante parte de la población se declara como no religiosa.
Por otro lado, Corea del Sur presenta diferencias, puesto que el cristianismo y el budismo son más predominantes en la vida de los surcoreanos, que al igual que los japoneses, se declaran en su gran mayoría como no religiosos.
Es en la escritura donde encontramos una gran diferencia entre las lenguas, puesto que los japoneses tienen 3 abecedarios distintos, mientras que los coreanos solo uno conocido como Hangul.
Existen varios sistemas de escritura en la cultura japonesa, donde podemos destacar que:
En cuanto al Hangul coreano; cabe destacar que cada bloque silábico consiste en alguno de los 24 fonemas: 14 consonantes y 10 vocales.
El Kimono parece en japón en el siglo VII cuando los nipones se encontraban bajo influencia china. Esta vestimenta colorida y ornamentada, ha evolucionado con el paso de los siglos, sobre todo por la influencia occidental y la apertura de la sociedad japonesa.
El Kimono utiliza una ornamentación clásica, con motivos extraídos de la naturaleza como flores, plantas y animales. Consta de distintas partes, todas ellas conforman una de las prendas más significativas de los japoneses.
Significa literalmente «ropa coreana», hace referencia periodo Josean y se usa como ropa semiformal o formal durante las festividades. Aunque se remonta a finales del siglo XII, investigadores afirman que podría ser de origen mongol o siberiano.
Los colores del Hanbok servían para diferenciar y diferenciar al pueblo de la realeza y a las mujeres casadas de las solteras. Pese a su desuso por la influencia occidental en Corea del Sur, todavía podemos verlo durante celebraciones tradicionales y épocas festivas.
Con tradiciones culturales parecidas en lo que a música se refiere, ambas comunidades han evolucionado de sonidos tradicionales a modernas melodías de ritmos pegadizos, que han traspasado las fronteras de sus países hasta el punto de convertirse en un reclamo en el mundo occidental como es el caso del K-Pop coreano. Este tiene su homólogo en el país nipón (J-Pop) que, aunque tiene menor presencia en occidente, es el género musical más consumido en el país.
Osaka: La vida nocturna y la gastronomía son el símbolo de esta ciudad, una de las más famosas por su ocio y sus restaurantes. Su mejor zona para vivir la experiencia es Dotonburi, un paseo comercial repleto de puestos de comida abiertos hasta bien entrada la noche donde poder degustar platos tan conocidos como el Okonomiyaki, Gyozas o los Takoyakis.
Kyoto: Durante más de mil años fue la capital del país. A día de hoy, respira arte, religión, cultura y es famosa por sus numerosos templos budistas, sus jardines, santuarios y casas de madera tradicional. Conocida también por las comidas Kaiseki y las geishas.
Hiroshima: Tristemente conocida por su trágica historia en la 2ª Guerra Mundial, esta ciudad de la isda de Honshu, ofrece mucho más que una un simple recuerdo del conflicto, pues sus montañas boscosas, aguas cristalinas, santuarios y museos son algunos de sus principales atractivos. En este sentido Miyajima, un santuario flotante en medio el mar caracterizado por su Torii permite relajarte a la vez que admirar la tradición nipona.
Kanazawa: Fue uno de los epicentros de la cultura y arte japonés donde encontraremos museos y talleres de cualquier temática. Son de obligada visita los jardines Kenrokouen, el barrio de Higashi Chayagai y el castillo de Kanazawa situado en pleno centro.
Nagoya: Conocida como la cuna de los guerreros samurái, Nagoya es una ciudad vibrante que a finales de marzo se puede disfrutar de la bella floración de los cerezos.
Andong: Principal centro mercantil de la antigua Corea, cuna del confucianismo en el país y del baile de máscaras, donde podremos regresar al pasado paseando por las calles del Hanok, disfrutando de la naturaleza y descubriendo artesanías locales.
Gyeongju: Designada por la UNESCO como uno de los diez lugares más históricos del mundo, se conoce como el »Museo sin muros». El Parque de los Túmulos donde descansan las 23 tumbas de los soberanos del Reino de Shilla, es uno de sus principales reclamos.
Busan: Ubicada en el sureste de la península, esta metrópolis situada en la cosa, ofrece hermosas playas, bosques subtropicales o deliciosas comidas. En ella se encuentra también el mercado local de mariscos, Jagalchi, uno de los más grandes del mundo.
Jeju: Esta isla volcánica es una de las siete maravillas naturales del mundo y tiene una cultura distinta al resto del país. Acantilados, playas, senderos y un sinfín de accidentes geográficos hacen de Jeju un paraíso natural único.
Gwangju: Ubicada al suroeste del país, es un importante centro comercial y administrativo. Además, es una ciudad que da mucha importancia al arte y cuenta con museos dedicados tanto al folclore como al arte moderno.
Conocida mundialmente por ser la capital de Japón, Tokio es una metrópolis que representa el centro de la política, economía, educación y cultura del país. Con más de 37 millones de habitantes, es una de las ciudades más pobladas del mundo. Su arquitectura, sus calles y sus habitantes, son símbolo de una cultura y combinan tradición milenaria con modernidad.
Es la capital histórica de Corea desde hará más de 600 años; esta ciudad, una de las más pobladas del territorio, representa el núcleo cultural y empresarial donde se mezcla la tradición de sus templos y palacios con la modernidad de sus rascacielos.
La mejor época para ver auroras boreales es entre diciembre y marzo. El invierno en…
Enero es el mes perfecto para descubrir las celebraciones culturales más impresionantes del mundo. Desde…
Descubre destinos ideales para viajar en febrero, teniendo en cuenta el clima y los fenómenos…
Abrimos una nueva salida para viajar a Albania estas Navidades, con salida el 29 de…
2 últimas plazas para viajar a Egipto en navidad. COMPLETO Un magnífico viaje de desierto…
Viajar al desierto es siempre una experiencia única, pero con algo de información adicional podemos…