Todos hemos deseado alguna vez que nuestro vuelo vaya vacío. Lo que nunca se nos pasaría por la cabeza es que vacío significara, literalmente, vacío.
Esto le ocurrío a Skirmantas Strimaitis el pasado 16 de marzo, cuando embarcó en el vuelo que le llevaría Vilna (Lituania) a Bergamo (Italia). Nada de colas para facturar, nada de levantarte para dejar ir al baño al pasajero de al lado. Iba completamente solo.
Según informa AP, el avión tenía capacidad para 188 pasajeros, pero los otros ocupantes eran cinco miembros de la tripulación y dos pilotos.
¿Cómo es posible?
Según hemos sabido, una agencia de viajes reservó todo un avión para llevar a un grupo de Italia a Lituania, pero compró solamente la ida. Ante esta situación, la aerolínea puso a la venta los billetes de regreso, que cubrirían únicamente ese trayecto. El resultado fué que únicamente una persona compró uno de estos billetes «one way«.
Solamente pasa una vez en la vida
Según comentó el pasajero a la prensa, «esto es algo solamente pasa una vez en la vida». Así que los viajeros que este verano váis a hacer nuestro viaje a Lituania – Letonia – Estonia, no os hagáis muchas ilusiones.
Y ahora os preguntamos, ¿que haríais vosotros si viajárais solos en un avión?