En un remoto rincón al norte de Tanzania se alza una asombrosa montaña llamada Ol Doinyo Lengai, donde las fuentes de lava se endurecen en el aire y luego se fragmentan como cristal.
En lenguaje Masai significa Montaña de Dios y se encuentra cerca del lago Natron y forma parte del sistema volcánico del Gran Valle del Rift. El volcán se encuentra en una parte de la zona de falla llamada Cuadrícula de Sikes y es uno de los volcanes más curiosos ya que es el único que arroja lava natrocarbonatita. Estas lavas son como ninguna otra lava, repleta de calcio, sodio y dióxido de carbono, dando lugar a algunas de las propiedades más extrañas de este tipo de erupciones.