Las últimas tribus birmanas viven en el llamado triángulo de oro de Myanmar, alejados del mundo que les rodea y con tradiciones muy arraigadas.
La capital del estado de Shan, Kientung, es el punto de partida para aquellos que quieran adentrarse en el territorio através de un terreno accidentado para conocer las tribus que habitan esta zona. Llegar a ellos no es fácil. Requiere paciencia y un poquito de esfuerzo pero la recompensa es impagable por que el espectáculo que ofrecen con su vestimenta de colores, sus adornos, sus costumbres y su forma de vida hacen que el cansancio desaparezca.